Despejando incógnitas

Me siento el hombre más importante después del Papa

(José Mª Del Nido, presidente del Sevilla)

Aunque es pronto, el primer partido de Uribe en el banquillo herculano sirve para despejar alguna incógnita sobre sus ideas. El equipo ha pasado a jugar un 4-2-3-1 en el que Tote abandona -es un decir pues casi nunca estuvo- la banda y se coloca por detrás del delantero referencia siendo el generador de casi todo el fútbol ofensivo. En el doble pivote la premisa fue la recuperación y el trabajo físico -Turiel y Farinós- antes que la creación y distribución -Montenegro o Mantecón-, una apuesta válida para dar seguridad defensiva pero que requerira de mayor poder de construcción en los partidos como local o contra equipos cerrados atrás. Uribe dio la titularidad a Turiel y esto servir para zanjar cualquier problema entre ambos, estuvo listo el entrenador en este aspecto. Completan el centro del campo Juanlu y Kike Mateo en las bandas pero en una posición más retrasada que de costumbre y ayudando mucho más al lateral. Todo indica que el entrenador se ha dado cuenta -al menos por ahora- que donde rinde Kike Mateo es en banda izquierda y abandona la idea de ubicarle en la derecha. En la defensa la novedad fue la entrada de Sergio que mejoró en mucho las prestaciones de Galindo en el eje, aún así sigue pasando factura tanto en ataque como en defensa el jugar con dos laterales improvisados.

Piti sigue mostrando que tiene desequilibrio, descaro y confianza en su tiro lejano pero es complicado situarle en este esquema salvo en el puesto de Tote, ambos se disputarán un sitio en cada partido. Moisés aprovechó sus 25 minutos de juego y de paso el entrenador demostró que cuenta con él por encima de viejas disputas. Por último, con Sendoa por primera vez en la grada el revulsivo para la banda izquierda fue Benítez, injustamente olvidado por Bordalás el ex del Recre tiene una buena oportunidad de hacerse un hueco en el once aprovechando la baja por sanción de Kike Mateo, además su juego se adapta mejor a este sistema.

Aunque no sirva para salir de los puestos de descenso, el punto de Castalia dejando al Castellón sin marcar y casi sin opciones de hacerlo y además creando ocasiones de gol aunque sea sin finalizarlas debe ser un punto de partida para la recuperación del equipo. En cierto modo Uribe quemará poco a poco las ideas de Bordalás para dar paso a las suyas propias. Queda por ver cómo manejará Uribe la situación de los Sendoa, Xisco y Galindo; no sería mala idea deshacerse de algún jugador en diciembre para aligerar una plantilla amplia en exceso y que no se repita semana tras semana la visión de jugadores en la grada o en casa, algo que no conlleva nada positivo a la dinámica de grupo.