12 d’octubre 2006

The Boss



Han bastado poco más de un par de meses para que el proyecto de ascenso a dos años marcado desde el Consejo de Administración haya sufrido su primer revés. Es el cese de Bordalás un serio contratiempo que deja la certez
a de que Subirats nunca confió en él y si le mantuvo en el cargo -eso sí, sólo con contrato por una temporada- fue por la admiración que Ortiz profesa por el técnico alicantino. Perdido todo el trabajo táctico realizado en la pretemporada y con urgencias por las cinco derrotas en siete partidos -tres de ellas ante rivales directos por el ascenso-, el Hércules se encuentra en el borde del precipicio pues quedarse sin objetivos a estas alturas de temporada es sumamente peligroso.

Yosu Uribe
Tan sólo doce horas pasaron entre la derrota ante el Cádiz y la presentación del que va a ser nuevo técnico herculano, es evidente que Subirats tenía el recambio preparado desde hacía tiempo. Uribe tiene fama de conducir bien vestuarios de clase media como los que tuvo en Las Palmas y Getafe, por contra su fuerte carácter le trajo problemas en su etapa en Elche. Una etapa que se asemeja a la situación actual del Hércules con un proyecto ambicioso, gran inversión y llegada de jugadores de renombre. Uri
be tuvo a su disposición a Nino, Moisés, Peragón, Luis Gil, Turiel o Trotta pero no alcanzó los objetivos marcados por la directiva y fue cesado mediada su segunda temporada. Sus primeros retos serán cambiar la dinámica perdedora del equipo y reconducir su mala relación con Turiel y Moisés -habrá que estar atentos al once que elija en Castalia-. Ha firmado por una temporada con opción a una segunda si consigue unos objetivos -mínimo sexto lugar- por lo que Subirats se guarda un último as en la manga a utilizar en la temporada 2007-08 en caso de no funcionar el técnico asturiano.
Javier Subirats
El jefe del proyecto es un enigma. Desde que llegó la prensa no tiene ninguna exclusiva, ni en verano con los fichajes ni ahora con la destitución del técnico, eso me gusta pues no tiene amigos -ni el ideólogo, ni nadie- pero que haya cesado tan pronto a Bordalás cuando con G
ranero la paciencia fue infinita me da que pensar mal. Siempre había apostado a largo plazo por los técnicos: Benítez, Granero, Quique Sánchez y los defendió más allá de lo que suele ser habitual cuando los resultados no llegaban y las críticas de prensa y afición se hacían más duras e intensas. Que ahora cambie la forma de actuar no es bueno pues se le firmó por ofrecer algo diferente al resto de directores deportivos y secretarios técnicos que han pasado por aquí. El cese del lunes es su primer fracaso en esta etapa, por el bien del Hércules esperemos que haya acertado en el recambio.

 
Creative Commons License
Aquesta obra està subjecta a una Llicència de Creative Commons.