Como montar en bici

La visión negativa de la realidad se impuso el sábado por la tarde. Los jugadores parecen haber olvidado jugar al fútbol y la mayoría de ellos son una sombra de sí mismos y de lo que fueron en su pasado, pocos son los que les creen ya. Por fortuna queda muy poca Liga y la situación no es apocalíptica, de hecho, una victoria acabaría con el sufrimiento del seguidor. Una afición que contempla como la que iba a ser la primera temporada del proyecto ascenso se consume en la mediocridad y que comienza a ver con desconfianza la segunda temporada del proyecto.


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Hércules 1 Ciudad de Murcia 1
Uribe sorprendió de inicio con Farinós como mediapunta detrás de la referencia en ataque, algo que el técnico ya usó a su llegada al club -Albacete, Ciudad de Murcia, Poli Ejido, Xerez, Valladolid, Lorca, Ponferradina y Elche- con un balance de 5 victorias 1 empate y 2 derrotas, el mejor balance de toda la temporada. Buscó Uribe un juego de posesión y mejorar la velocidad de balón con tres mediocentros en el once.

Las buenas intenciones se cumplieron a medias pues nunca el juego de combinación del Hércules llegó a imponerse en la primera parte y apenas creó peligro salvo en las arrancadas de Sendoa y Albacar -el mejor de la primera parte- por la izquierda y una buena ocasión en un pase atrás de Mantecón que no encontró rematador. El Ciudad tenía mejor circulación de balón aunque tampoco creaba oportunidades salvo en dos opciones propiciadas por sendos graves fallos de un nervioso Urbano que solventó Aragoneses -una gran noticia su reaparición- con espléndidas paradas. En el área contraria era el portero José Juan -ni un balón blocado en todo el partido- el que rivalizaba con Urbano en errores y de paso apuntaba la solución al partido: Moisés.



Mismos protagonistas tras el descanso y mismo guión. Tercer fallo de Urbano -¿veremos al castigado Mármol en Ejido?- en un mal despeje y su rechace, esta vez sí, lo convertía Manolo. Marcador en contra, grada nerviosa pidiendo la cabeza de Uribe y éste que se lo juega el todo por el todo y quita a un voluntarioso y desacertado Carmelo por Juanlu, a Diego Mateo por Tote y el cambio que supuso el giro que necesitaba el partido, Urbano por Moisés. Porque el partido era para un jugador que dominase el juego aéreo ante una defensa que pasó por muchos apuros y que por más empeño que ponía Oltra desde la banda no salía de su propia área.

El posicionamiento quedó con defensa de tres atrás -gran partido de Sergio insuperable en su marca en solitario y sin ayudas a Goitom-; Farinós y Mantecón por delante; Juanlu, Tote y Sendoa en la mediapunta y Calandria y Moisés arriba. Con Moisés en el campo y como tantas otras veces hemos visto en las dos últimas temporadas el juego se convirtió en una busqueda constante y desde cualquier lugar de la cabeza del ariete convertido en el colocador del voleibol y en uno de los muchos balones que logró bajar Tote lo aprovechó con una gran volea. Pobre recurso pero efectivo, y eso es lo que precisa el equipo ahora mismo, efectividad traducida en puntos.

Socarrat
Los jugadores del Hércules cayeron en la primera parte en la trampa del jugador lipotímico. Una jugada que pareció olvidada en la segunda parte -hasta en tres ocasiones no hicieron caso del desmayado- hasta que, a poco de la conclusión del partido, otra vez cayeron en la trampa para ira del capitán Sergio que corrió como un poseso desde su posición para echarle la bronca a sus compañeros. Por su cara diría que andaba tan socarrat como yo en la grada ante la actitud del resto de jugadores. A ver si aprenden de una vez, que no son novatos precisamente y se están jugando mucho. Ay, que razón tiene Mendilíbar.

Fotos: La Verdad

Vídeo: RuBeN[S]